Biblioteca Digital Wesleyana

Hombres y Mujeres Santos del Movimiento Metodista

Odilon Massolar Chaves

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Artículo 184 del Código Penal y Ley 96710 de 19 de febrero de 1998.

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¡Toda la gloria a Dios!

Odilon Massolar Chaves es un pastor metodista jubilado, con un doctorado en Teología e Historia de la Universidad Metodista de São Paulo.

Su tesis trataba sobre el renacimiento metodista en Inglaterra en el siglo XVIII y su contribución como paradigma para nuestros días.

Fue editor del periódico oficial metodista y coordinador del Curso de Teología.

Declaración de derechos de autor: Estos archivos son de dominio público y se derivan de una edición electrónica que está disponible en el sitio web de la Biblioteca Etérea de Clásicos Cristianos.

Río de Janeiro – Brasil

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"Dame cien predicadores que no teman nada más que al pecado, y que no deseen nada más que servir a Dios, y no me importa si son clérigos o laicos, solo ellos sacudirán las puertas del infierno y establecerán el reino de los cielos aquí en la tierra".

Juan Wesley

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Índice

·Introducción

·Buscando ser santos como la Iglesia primitiva

·La necesidad de una santificación completa

·Esteban del movimiento metodista

·Un hombre santo

·La predicadora más conocida de su generación

·Predicador, líder de clase y consejero

·Consagrada a Dios, sirvió a los pobres

·Honesto, celoso, cariñoso y entusiasta

·Ministró a los enfermos, los pobres y los encarcelados

·Totalmente dedicado a Dios

·Ferviente y celoso

·Gran comprensión y profunda piedad

·Una mujer con un profundo conocimiento del carácter y los propósitos de Dios

Introducción

"Hombres y Mujeres Santos del Movimiento Metodista" es un libro de 41 páginas que trata sobre la esencia del metodismo, la santidad, la vida santa.

En el movimiento metodista del siglo XVIII en Inglaterra, muchos hombres y mujeres experimentaron la santificación completa, la santidad cristiana o la perfección. Aquí destacamos algunos de estos personajes.

La santidad siempre ha sido el objetivo principal de Wesley y los metodistas. Algo que necesitamos rescatar en nuestros días.

Wesley tenía el propósito de proporcionar a los metodistas la vida santa como era en la Iglesia primitiva. Las bandas fueron creadas para este propósito.

Ejemplos de vidas santificadas que nos inspiran y motivan a buscar en nuestros días.

El autor

Buscando ser santos como la Iglesia primitiva

Wesley siempre tuvo el propósito de buscar la santidad. Es el propósito al que el metodismo fue llamado por Dios. El Espíritu Santo tiene un papel esencial en este objetivo. Es una vida santa como la Iglesia primitiva

Wesley buscó implementar este propósito en todos los que entraron al metodismo a través de las bandas y enseñó lo mismo a los predicadores.

El teólogo metodista Richard Heitzenhater dijo:

"El enfoque unificador de Wesley fue la preocupación por difundir la santidad bíblica. Este énfasis en la teología práctica fue la característica central de la tradición de la "vida santa" que durante siglos había atravesado muchas de las divisiones tradicionales dentro del cristianismo (...)".^[1]

Wesley creía que era el metodismo levantado por Dios para cambiar la situación actual, es decir, para: "(...) para reformar la nación... y para difundir la santidad bíblica sobre la tierra".^[2]

El famoso escritor inglés Hall Caine describió a los primeros predicadores metodistas como "algunos de los hombres más dulces, puros y verdaderos que jamás hayan caminado en el mundo de Dios".^[3]

La fascinación por la Iglesia primitiva

Incluso antes de ser misionero en Georgia en 1735 y su cálida experiencia en 1738, Wesley tenía el encanto de una Iglesia similar a la Iglesia Primitiva.

Wesley estaba convencido:

"Buscad la renovación, y 'admirad e imitad' a la iglesia primitiva "su piedad e integridad"

"Ya en 1732, fue influenciado por un grupo primitivista conocido como los Altos Clérigos de Manchester. Durante sus últimos años en Oxford, estudió intensamente a los padres de la iglesia. Leyó el Cristianismo primitivo de William Cave (1714) y fue persuadido por el mandato de Cave de buscar la renovación y "admirar e imitar" a la iglesia primitiva "su piedad e integridad, su infinito odio al pecado, su cuidado y celo por mantener el rigor y la pureza de las costumbres que hicieron que su religión fuera tan famosa y triunfante en el mundo".[4]

La búsqueda con los moravos

Wesley buscó aprender de hombres santos en Alemania en 1739.

Wesley dijo:

"Y esperaba que la conversación con estos hombres santos, que eran testigos vivos del pleno poder de la fe, y sin embargo capaces de soportar a los débiles, sería un medio, bajo Dios, de establecer mi alma de tal manera, que pudiera continuar de fe en fe, y de fortaleza en fortaleza".^[5]

Para Wesley, los moravos se parecían a los primeros cristianos.

"Wesley escribió de esta comunidad, que se parecían a los cristianos de la antigüedad, "que lo dejaron todo por su Maestro, y que en verdad aprendieron de él, siendo mansos y humildes, muertos al mundo, llenos de fe y del Espíritu Santo".^[6]

Las fuentes de la comprensión de Wesley del cristianismo primitivo

Fue a través de su vida académica que Wesley fue despertado a una vida santa según la Iglesia Primitiva.

"El conocimiento de la iglesia primitiva fue transmitido a Wesley por sus padres en la rectoría de Epworth y a través de su vida académica en Oxford. Sin embargo, su interés en la iglesia primitiva tomó una dirección nueva y más intensa, comenzando con su amistad con John Clayton en 1732. Clayton y su mentor, Thomas Deacon, impulsaron a Wesley a investigar la doctrina, la disciplina y la práctica de la iglesia primitiva".^[7]

Wesley creía que el cristianismo primitivo podía restaurarse renovando la doctrina, la liturgia, la disciplina y la práctica devocional de la iglesia primitiva".^[8]

Incluso parte de la organización metodista se basó en la práctica de la Iglesia primitiva.

Había un propósito para Wesley para restaurar la doctrina y la práctica de la Iglesia primitiva.

El propósito principal de los grupos pequeños era reunir a "personas que están interesadas en seguir seriamente el estudio de la vida santa".^[9]

Las Bandas en particular proporcionaron la comunión y la búsqueda del amor perfecto.

Las Clases estimularon con una disciplina espiritual, la confesión, el desarrollo de la salvación y la santificación. Había una responsabilidad mutua.

Más tarde, ante las nuevas exigencias, Wesley hizo nuevas adaptaciones, creó las bandas selectas para aquellos que habían recibido la remisión de los pecados y estaban teniendo una vida ejemplar.

Wesley puso a algunas mujeres de Bristol que se habían vuelto negligentes en una banda separada. Se conoció como bandas penitenciales.^[10]

También había un gran grupo llamado los Agapes "en el que los miembros de todas las clases de una sociedad se reunían con el propósito de partir el pan juntos, siguiendo la costumbre de la iglesia primitiva, y donde sus experiencias cristianas se informaban públicamente".^[11]

Estas adaptaciones y apertura a lo nuevo caracterizaron a Wesley y al metodismo en Inglaterra en el siglo XVIII.

En las Sociedades, estaba la ministración de la Cena del Señor, el bautismo, la predicación, los testimonios, la comunión entre nosotros, la Fiesta del Amor, etc.

El mover del Espíritu Santo era una constante en medio de las reuniones, especialmente el derramamiento del amor de Dios.

"Por fin ha llegado nuestro Pentecostés", dijo en 1762, mientras contemplaba el progreso de la obra misional. Solo en Londres, más de 400 miembros de las sociedades testificaron que fueron liberados de todo pecado. En Liverpool, la sociedad ha sufrido una verdadera metamorfosis en su perfección".^[12]

El avivamiento fue el resultado del trabajo espiritual que las sociedades desarrollaron en la búsqueda de la perfección cristiana. El avivamiento había comenzado en 1761 y el objetivo era buscar la santidad.

"El gran avivamiento que apareció dentro de las sociedades en 1761 fue la mejor prueba de que se tomaron muy en serio esta misión".^[13]

Wesley estaba feliz con lo que presenció. Fue la culminación de toda una obra.

Dijo:

"Le agradó a Dios derramar su Espíritu por todas partes, tanto en Inglaterra como en Irlanda, y de una manera que nunca antes habíamos visto, al menos en los últimos veinte años".^[14]

El avivamiento en Dublín fue el más notable para Wesley. Comenzó con un predicador llamado John Manners, una persona sencilla y poco elocuente, pero que parecía destinado a este trabajo. John Wesley describió lo que vio:

"Estas personas son tomadas por el fuego divino; Nunca he sido testigo de días como el domingo pasado. Mientras oraba en sociedad, el poder de Dios se apoderó de nosotros por completo, y algunos exclamaron en voz alta: 'Señor, ahora puedo creer'.^[15]

Wesley fue testigo de la llama del avivamiento no solo entre los jóvenes y adultos, sino también entre los niños alrededor del año 1781.^[16]

En Epworth, la industrialización había instalado cuatro fábricas de hilado y tejido. Varios niños estaban empleados. Algunos de ellos entraron en una reunión de oración y fueron tocados en el corazón.

"Algunos de ellos que entraron por casualidad en una reunión de oración fueron tocados en el corazón. Sus esfuerzos entre los camaradas cambiaron las condiciones en tres fábricas".^[17]

La necesidad de una santificación completa

Wesley entendió que esto podría suceder en nuestra existencia aquí en la tierra por santificación completa, santificación completa o perfección cristiana. Sin una santificación completa es imposible ser salvado de todo pecado.

Wesley cita varios versículos para apoyar su palabra: "Él redimirá a Israel de todos sus pecados" (Salmo 130:8); “... Te limpiaré de todas tus iniquidades y de todos tus ídolos". (Ezequiel 36:25); Teniendo estas promesas, "limpiémonos de toda inmundicia, así de carne como de espíritu, perfeccionando nuestra santidad en el temor de Dios" (2 Corintios 7:1); "El Señor tu Dios rodeará tu corazón y el corazón de tu descendencia, para que ames al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma, para que vivas". (Deuteronomio 30:6).

Finalmente, cita 1 Tesalonicenses 5:23: "Que el Dios de paz mismo os santifique por completo, y ruego a Dios que todo vuestro espíritu, alma y cuerpo sean conservados irreprensibles hasta la venida de nuestro Señor Jesucristo".

Aquí hay expresiones como "toda inmundicia", "todos tus pecados", "santifica completamente". Uno debe estar convencido de la profunda corrupción del corazón para preocuparse por la santificación completa, dice Wesley.

Esta santificación completa no excluye el error humano. No hace del hombre un Dios infalible: "Creo que no hay perfección en esta vida que excluya estas transgresiones involuntarias, que creo que son naturalmente la consecuencia de la ignorancia y los errores inseparables de la mortalidad".[18]

No hay perfección absoluta en la tierra. "Un cristiano es perfecto hasta el punto de no cometer pecado". El cristiano será perfecto como su Maestro, y el Maestro estaba libre de todos los sentimientos pecaminosos.

Como afirma David Seamands en su libro The Healing of Memories: "El objetivo final no es simplemente aliviar el dolor del pasado o algún nivel de cordura mental y emocional, sino crecer hacia la semejanza a Cristo y una obra de maduración en la santificación y la verdadera santidad".

Pero, ¿cuáles son las marcas esenciales, entonces, de una persona que ha alcanzado la santificación completa?

Él responde: "... aquel en quien está la mente que estaba en Cristo, y que camina como Cristo anduvo; que ha sido lavado de todas las impurezas de carne y espíritu; el que no es piedra de tropiezo para los demás, y el que no comete pecado... aquel a quien Dios ha santificado totalmente en cuerpo, alma y espíritu, el que anda en la luz como Él es en la luz, no hay tinieblas, habiendo sido lavado de todo pecado por la sangre de Jesucristo Su Hijo".[19]

Wesley dice además: "Tu alma es realmente todo amor, llena de entrañas de misericordia, bondad, mansedumbre, magnanimidad y paciencia. Su vida está de acuerdo con estas cualidades, llena de obras de fe, paciencia, esperanza y obra de amor. Todo lo que hace, ya sea de palabra o de hecho, lo hace en el nombre, el amor y el poder del Señor Jesús".[20]

En su diario, Wesley cita ejemplos de personas que recibieron la bendición, como él también la llama, santificación completa. Cuenta la experiencia del Sr. Fugill quien, una noche después de buscar a Dios, experimentó la bendición. Y fue en el momento de la predicación. Este caballero dice: "... Mi corazón se llenó cada vez más, hasta que ya no era poderoso. Quería estar solo, derramar mi corazón ante Dios; y cuando llegué a casa, no pude hacer nada más que alabar y agradecer a Dios. Desde ese momento, no he sentido nada más que amor; sin pecado de ningún tipo. Y espero no volver a pecar nunca más, ni ofender a Dios".[21]

Aquellos que han sido justificados y han nacido de nuevo no pueden sino buscar crecer espiritualmente, no pueden evitar santificarse, porque todavía hay en el creyente la naturaleza malvada que lucha contra el espíritu. Aquellos que enseñan lo contrario de esto, dice Wesley, tienen las peores consecuencias: "Ella suprime toda vigilancia sobre nuestra naturaleza pecaminosa, sobre la Dalila que se nos dice que se ha ido, aunque todavía descansa contra nuestros pechos".[22]

Por eso dice además: "En la medida de lo posible, ejerzamos toda diligencia en 'pelear la buena batalla de la fe'. Más y más activamente, 'velemos y oremos' contra el enemigo interior".[23]

Además, dice que tomemos toda la armadura de Dios para que cuando luchemos contra carne y sangre y también contra "principados, potestades y espíritus depravados en las regiones celestes, podamos 'estar firmes en el día malo' y, habiendo hecho todo, estar firmes en la fe".[24]

Finalmente, debemos ser conscientes de que siempre debemos caminar hacia la santificación completa. Solo entonces tendremos poder sobre la "Dalila" que insiste en descansar contra nuestro pecho.

En Hebreos 3:13, hay una orientación al respecto: "... exhortaos unos a otros cada día, durante el tiempo que se llama hoy, para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado". Continúa diciendo: "Por tanto, dejando a un lado los principios elementales de la doctrina de Cristo, seamos conducidos a lo que es perfecto" (Hebreos 6:1).

Algunos hombres y mujeres del Movimiento Metodista han alcanzado una vida santa. Entre ellos, destacamos:

Esteban del movimiento metodista

Thomas Walsh (1730-1759) nació en Ballylin, condado de Limerick, Irlanda. Era hijo de un carpintero y una familia católica. A la edad de 19 años fue a la Iglesia Anglicana. Fue maestro en Limerick.

En 1749, el predicador metodista Robert Swindells fue a predicar a Limerick, y entre los oyentes estaba Thomas Walsh, quien en 1750 asistió a la Sociedad Metodista en Newmarket.

Después de cuatro meses en las reuniones, nació de nuevo en medio de oraciones y canciones, experimentando el verdadero poder y amor de Dios.

Debido a su fe, fue ridiculizado por católicos y protestantes al ser llamado hipócrita, tonto, engañador, pero continuó deseando que se le enseñara más sobre Cristo. Dijo en ese momento: "Deseaba estar siempre en la escuela de Cristo, aprendiendo las lecciones de su gracia".

Aprovechó el hecho de que Wesley estaba en una gira de tres meses por Irlanda y le preguntó sobre el llamado de Dios que creía haber recibido. Wesley le pidió a Thomas que le enviara un testimonio escrito de su conversión y experiencia espiritual. Después, Wesley respondió en una nota: "Mi querido hermano. Es difícil juzgar lo que Dios te ha llamado hasta que se realiza la experimentación. Entonces, cuando tengan la oportunidad, pueden ir a Shronell y pasar dos o tres días con la gente de allí. Háblales en irlandés".

Fue con un amigo caminando treinta millas a su primera predicación en Shronell, donde una gran congregación se reunió en un granero.

Tomás predicó sobre Romanos 3:28: "Por tanto, concluimos que el hombre es justificado por la fe sin las obras de la ley".

Predicó en irlandés e inglés y se convirtió en un evangelista talentoso y decidido. No tenía miedo y fue encarcelado en la ciudad de Bandon, pero continuó predicando desde la ventana de su celda. En 1753, Wesley lo nombró para la itinerancia inglesa.

En su predicación, algunos se burlaron y otros se volvieron al Señor. Sintiendo el ardiente llamado de Dios, se entregó al ministerio del Evangelio predicando dos veces al día en Limerick con gran poder. Las personas que lo escucharon comenzaron a tener una profunda convicción de pecado y se convirtieron.

Dejó su trabajo de maestro y viajó a otras partes del sur de Irlanda predicando dos o tres veces al día. Predicó en las montañas y caminos, prados, casas privadas, prisiones y barcos.

"Multitudes de todas las denominaciones vinieron a escucharlo predicar. En los pueblos rurales, muchas personas se detuvieron a escucharlo por curiosidad, pero pronto se les encontró llorando". Los pobres cayeron de rodillas clamando por la misericordia de Dios.

Además del idioma irlandés, sabía inglés, latín, griego y hebreo. "Los sacerdotes y otros enemigos del Evangelio se indignaron por su éxito e influencia y comenzaron a difundir informes falsos y rumores al respecto. Eso no funcionó. Entonces las multitudes se agitaron contra él. A menudo fue atacado con palos y piedras; incluso mientras predicaba, tendría que huir de la vida de una turba que arrojaba piedras".

En enero de 1752, viajaba a Roscrea y un grupo de hombres armados con palos y piedras, que habían jurado hacerle daño, lo tomaron cautivo. Trajeron a un sacerdote católico y protestante de la ciudad con la esperanza de que rechazara el metodismo. Qué sabio fue Esteban en las respuestas y las confundió. Así que prometieron dejarlo ir siempre y cuando no regresara a Roscrea. Él respondió que preferiría morir antes que hacer eso. Lo llevaron a la ciudad, donde lo amenazaron con arrojarlo a un pozo si no prometía que no regresaría. Una vez más se negó.

Un ministro local acudió en su ayuda y lo escoltó a un lugar seguro. Pero Thomas era tan intrépido como Stephen y pronto salió a la calle. En medio de la multitud del mercado predicó audazmente el Evangelio. La turba lo agarró violentamente y lo echó de la ciudad. En su caballo elevó la voz en oración a Dios. Thomas no se rindió y luego regresó a donde algunos habían creído y así formó una Sociedad Metodista.

En 1752, era uno de los nueve predicadores itinerantes metodistas en la tierra.

En mayo de 1754, Thomas Walsh predicó en Londres, al aire libre, a grandes multitudes en su propio idioma. Una semana después, predicó en Moorfeilds, en irlandés e inglés.

"Walsh regresó de Londres a Cork, donde tuvo una buena audiencia de grandes multitudes de católicos que lo escucharon con alegría a pesar de que los sacerdotes hicieron todo lo posible para impedirlo".

Wesley dijo que no conocía a ningún predicador que en tan pocos años Dios usara para convertir a tanta gente. Wesley también dijo: "Nunca antes había visto a un maestro de conocimiento bíblico así, y nunca esperé volver a verlo".

Tomás era ferviente en la Palabra y en las oraciones. Lloró al ver a la gente volverse a Cristo.

Cayó gravemente enfermo, pero poco después continuó predicando.

En 1756, visitó Newtownards para predicar y una multitud lo arrastró por las calles. Logró liberarse y luego hizo otro intento de predicar, pero fue atacado por esta multitud y corrió por su vida atravesando los campos hasta las montañas y empapándose por completo, lo que ciertamente empeoró su salud.

En 1758 murió en Dublín en una habitación de la capilla de Whitefriar Street.

En 1762, James Morgan escribió, en Londres, el libro "La vida y la muerte del Sr. Thomas Walsh".

Un hombre santo

John William de La Flechére o John Fletcher (1729-1785) nació en Nyon, Suiza. "Su padre era miembro de una de las familias más respetadas del cantón de Berna, Suiza, y era coronel del ejército francés. Su padre lo puso a estudiar en Ginebra, donde se distinguió académicamente por su brillantez. Luego estudió alemán y hebreo en el cantón suizo de Lensbourg".

Quería ser mercenario y se fue a Lisboa para comandar un buque de guerra portugués que lo llevaría a Brasil, al servicio del rey de Portugal. Pero se rindió. Intentó unirse al ejército holandés, pero no funcionó.

Desempleado, fue a Londres para contactar a los metodistas y se convirtió al Señor. Comenzó una vida maravillosa. Poco después comenzó a predicar. Tenía una gran demanda en diferentes iglesias. La humildad y el fervor fueron sus grandes marcas.

En 1757 fue ordenado diácono y sacerdote en la Iglesia Anglicana, pero a veces predicaba con Wesley y lo ayudaba con los deberes en las capillas metodistas de Londres como uno de sus coadjutores.

Su salud nunca fue buena. Se preocupaba por los pobres y se hizo conocido en toda Inglaterra como "el vicario de Madeley" (1729-1785). Los bares de esta localidad estaban cerrados y se levantaba a las cinco de la mañana con una campana los domingos invitando a la población a ir a la iglesia. Nunca fue itinerante.

Fue presidente de la Universidad de Trevecca en el sur de Gales, fundada por la condesa de Huntingdon para capacitar a líderes cristianos durante el renacimiento del siglo XIX. XVIII.

Adoptó el idioma inglés publicando obras importantes. Fue considerado un gran teólogo. Estudiaba la Biblia de 14 a 16 horas al día.

En 1776, escribió un panfleto y se envió una copia al rey de Inglaterra, quien quería recompensarlo con una alta posición eclesiástica, pero se negó, diciendo: "Solo quiero más gracia". Cuando se le preguntó si quería algo, dijo: "(...) No quiero nada más que más gracia".

Se destacó en el ministerio del gobierno de la Iglesia. En momentos cruciales, defendió a Wesley en cuestiones doctrinales. Fue su asistente y considerado el apóstol Juan del Metodismo. No era elocuente, pero tenía tal piedad y franqueza que sus palabras tocaban los corazones de sus oyentes.

Wesley esperaba que aceptara la invitación para reemplazarlo a la cabeza del movimiento metodista en caso de que muriera. Era la persona cuya combinación de conocimiento y piedad vital se ajustaba al modelo que Wesley tenía en mente para reemplazarlo. Pero no lo aceptó debido a su mala salud y modestia.

En 1781, Fletcher se casó con la líder metodista Maria Bosanquet. Le escribió a Wesley sobre su esposa: "... Puedo decirles que mi esposa es mucho mejor para mí que la Iglesia para Cristo".

Wesley lo nombró presidente del Colegio Trevecca. Permaneció en el cargo durante dos años y se fue poco después. Fletcher escribió mucho sobre la santificación completa.

Wesley lo influyó y fue influenciado por los escritos de Fletcher sobre la perfección a través de la purificación del corazón para ser perfeccionado en el amor. Fletcher se convirtió en el principal sistematizador de la teología metodista.

De él, Wesley escribió: "En el transcurso de 80 años, dijo: 'He conocido a muchos hombres de corazón fino y vidas perfectas; pero nunca he visto otro como él; otro que es igual en profunda devoción a Dios. Un hombre tan inmaculado como él (...)".

Fletcher era el mejor amigo y el más hábil de los consejeros de Wesley. El pastor metodista Paul E. Buyers escribió de él como un hombre santo: "John Fletcher, el hombre santo del Movimiento Metodista (1729-1785)".[25]

La predicadora más conocida de su generación

Mary Barritt-Taft (1772-1851), nació en Lancashire, Inglaterra, el 12 de agosto de 1772. Hija de John Barritt, un no creyente, y Mary, una metodista, tenía una hermana y cinco hermanos. Su hermano John era un predicador itinerante wesleyano. A pesar de la resistencia de su padre, Mary y su hermano mayor John se unieron al metodismo. A la edad de 17 años, ya estaba activa.

En 1802, se casó con el reverendo Zacharias Taft, ministro metodista desde 1801, con quien viajó y predicó. Zacarías fue un gran protagonista en la defensa de las mujeres predicadoras. En 1803, publicó Pensamientos sobre la predicación de las mujeres. En 1809, defendió la base bíblica del ministerio de las mujeres.

Los dos ejercían un ministerio común de predicación.

Mary convirtió a varias personas, que se convirtieron en pastores wesleyanos. Los conversos con su predicación de la década de 1790 fueron los futuros ministros Thomas Jackson, Robert Newton y Joseph Taylor. En 1827, incluso publicó un relato de su trabajo como evangelista.

En 1803, las mujeres comenzaron a tener mayores dificultades para predicar por decisión de la Conferencia de la Iglesia. Algunos ignoraron los obstáculos y continuaron predicando. La más famosa fue Mary Barritt-Taft.

Ella inspiró a las congregaciones con su predicación. En 1827, publicó Memorias de la vida de la Sra. Mary Taft, anteriormente Miss Barritt, que se vendió con fines benéficos.

Fue la predicadora más conocida de su generación con un ministerio extremadamente exitoso durante cincuenta años.[26]

Predicador, líder de clase y consejero

Sarah Crosby (1729-1804) nació en Leeds, Inglaterra. Se sintió atraída por la predicación de Whitefield, y en 1750 aceptó la doctrina de John Wesley sobre la perfección cristiana.

Ese mismo año, se casó y luego se convirtió en líder de clase. Cuando su esposo la dejó en 1757, Crosby se fue a Londres, el centro del metodismo en Inglaterra.

Entró en contacto con mujeres metodistas y se convirtió en consejera de varias mujeres metodistas, entre ellas Mary Bosanquet.

En 1761, Crosby llevó a cabo una reunión de clase en Derby para aproximadamente 200 personas.

Insegura porque había tanta gente, se limitó a dirigir un himno, oró y fue testigo de cómo el Señor la había persuadido a huir de todo pecado.

En 1771, le escribió a Wesley diciendo: "Si no creyera que tengo un llamado extraordinario, no actuaría de manera extraordinaria".

Wesley le dijo: "Me pusiste en un gran problema", porque los metodistas no permitían mujeres predicadoras. Wesley continuó: "Pero simplemente te diré lo que hay en mi corazón. ' ... No veo que hayas infringido ninguna ley. Ve despacio y con firmeza".

Wesley reconoció "el extraordinario llamado de Dios al metodismo", incluido Crosby, y la autorizó a hablar de su "experiencia". Wesley también aprobó a Mary Bosanquet.

Eran evangelistas dedicadas junto con otras 41 mujeres en la época de Wesley. Crosby predicó por el resto de su larga vida.

Para el año 1777, "había viajado 960 millas, predicado en 220 reuniones públicas, 600 reuniones privadas, escrito 116 cartas de consejo espiritual".

Crosby estuvo involucrada con la comunidad de mujeres metodistas en Cross Hall en Madelely, que incluía a Mary Bosanquet Fletcher, Sarah Ryan, Mary Tooth, Ann Tripp y Elizabeth Mortimer.

En esta comunidad había un orfanato. Posteriormente, Crosby regresó a Leeds.[27]

Consagrada a Dios, sirvió a los pobres

Maria Bosanquet (1739-1815) nació en Leytonstone, Waltham Forest, Londres, Inglaterra. Sus padres eran ricos y anglicanos. Desde muy joven, mostró interés espiritual en reconocer que era una pecadora y le preguntó si tenía fe en Cristo. Su familia era de la alta sociedad.

Una conversación entre su hermana y una sirvienta metodista confirmó su visión de la fe. Conoció a algunas mujeres metodistas en Londres que la llevaron a abandonar la frívola vida social para dedicarse a Cristo. Experimentó la presencia de Jesús y deseó ser santa y dedicada a su Salvador.

A la edad de 21 años, en 1760, dejó a sus padres y se mudó a Leytonstone. En 1762, abrió un orfanato con la metodista Sarah Ryan para huérfanos. Los predicadores metodistas itinerantes encontraron descanso allí. La casa se convirtió en una escuela, orfanato, hospital y posada.

En 1768, transfirió la institución a Cross Hall, en Yorkshire. En 1771, escribió una carta a Wesley diciendo que tenía un llamado a predicar y le pidió consejo. Wesley respondió:

"Londonderry, 13 de junio de 1771.

Mi querida hermana:

Creo que la fuerza de su causa radica en esto: la extraordinaria vocación que tiene. Estoy tan seguro de esto, porque tiene a cada uno de nuestros predicadores laicos; De lo contrario, de ninguna manera podría aceptar su predicación.

Es muy clara para mí la extraordinaria dispensación de Su providencia. Por lo tanto, no es sorprendente que sucedan algunas cosas en él que no encajan en las reglas ordinarias de disciplina. La regla común de San Pablo era: "No permito que una mujer hable en la congregación" (1 Corintios 14:34; 1 Timoteo 2:12)

Sin embargo, en casos extraordinarios hizo algunas excepciones; particularmente en Corinto.

Continúo, mi querida hermana,

Tu amado hermano,

John Wesley".

Wesley consideraba el metodismo como una subvención extraordinaria de Dios, incluso para que las mujeres ministraran. Bosanquet organizó una sociedad con 25 miembros y fue guía de clase.

Bosanquet se casó, en 1781, con John Fletcher, un gran líder del metodismo y amigo de Wesley. Estaban muy felices. Durante los cuatro años de su matrimonio, abrieron nuevos lugares de predicación en Madeley. Se tomó en serio la enseñanza de Wesley de "dar todo lo que puedas" usando tus propios recursos financieros y tu tiempo para ayudar a las personas necesitadas. Gastó su fortuna en el mantenimiento del orfanato.

Su matrimonio es un modelo para que las mujeres cristianas continúen su vida espiritual y profesional incluso después del matrimonio. Su esposo apoyó su ministerio. Aunque era viuda, continuó el trabajo durante otros 29 años. Su hogar era un centro de gran actividad espiritual.

El 14 de agosto de 1815, escribió: "Treinta años después de este día bebí la amarga copa y cerré los ojos de mi amado esposo, y ahora yo misma me estoy muriendo, Señor, prepárame, siento la muerte muy cerca. ¡Espero y deseo volar al seno de mi Dios!".

La vida de Mary Bosanquet-Fletcher fue considerada de completa devoción a Dios. Siempre dedicó su tiempo, dinero y energía. Su dedicación era incesante a los demás, desde el cuidado de los niños hasta la comunicación de las buenas nuevas de salvación.

Fue una de las primeras diaconisas del metodismo.[28]

Honesto, celoso, cariñoso y entusiasta

Thomas Webb (1724-1796) nació en Salisbury, Inglaterra. Era un oficial británico y un hombre rico.

En 1758, fue a Estados Unidos para luchar contra las fuerzas francesas en la Guerra de los Siete Años.

Sirvió en Amherst y Wolfe. Fue capturado en Nueva Escocia y perdió un ojo durante la Batalla de Louisberg en 1759, y comenzó a usar un parche verde en el ojo. En ese año, publicó un tratado militar sobre la ciencia de hacer la guerra.

En 1764, estaba deprimido y convencido de que era un pecador.

En 1765, se convirtió mientras escuchaba predicar a Wesley, en Bristol, Inglaterra, y se unió a la Sociedad Metodista. Poco después, recibió una licencia como predicador local.

Wesley dijo: "Él es un hombre de fuego, y el poder de Dios acompaña continuamente su palabra".

Webb ofreció sus servicios a Barbara y Philip en febrero de 1767 en Nueva York y asumió un papel de liderazgo en la creciente congregación.

Perteneció al ejército inglés. "Estacionado en Albany, Nueva York, Webb abrió una casa de oración con soldados británicos". Predicó con su túnica roja y su espada.

Webb fundó el metodismo en Filadelfia en 1768. También introdujo el metodismo en Delaware en 1769 y ayudó en la compra del primer templo metodista en St. George en 1770. Webb regresó a Nueva York como civil y laico.

Durante seis meses, hizo un intenso trabajo evangelístico en Nueva York. Incansable, inauguró una obra metodista en Nueva Jersey, Delaware, Maryland y muchas áreas de Pensilvania.

En 1772, fue delegado a la Conferencia Metodista en Leeds, Inglaterra.

Reconociendo sus talentos administrativos, John Wesley lo envió a resolver asuntos en Limerick y Dublín, Irlanda.

En 1773, regresó a Estados Unidos con su nueva esposa, Grace. Fue acusado de ser un espía de los británicos. Fue encarcelado y confinado en un campo de prisioneros de guerra, donde predicó. Dificultaron su liberación, pero luego logró ser intercambiado por otro prisionero.

El metodismo estaba creciendo y Webb recaudó dinero para construir nuevas capillas. Tenía una gran elocuencia y vitalidad. Murió en Bristol a la edad de 72 años.

Charles Wesley lo llamó entusiasta honesto, celoso y amoroso. Predicó con una espada desde el púlpito. Se le llama el primer apóstol del metodismo estadounidense.

También fue conocido por sus esfuerzos filantrópicos para los prisioneros de guerra franceses y los soldados y marineros estacionados en Porsmouth.

John Adams dijo que a través de sus sermones llegaba a la imaginación y tocaba muy bien las pasiones.

Muchos lo consideran el fundador del metodismo estadounidense.

Arthur Bruce Moss escribió un libro sobre su vida: "Un hombre de coraje y visión en conmemoración del 250 aniversario de su nacimiento el 31 de mayo de 1725".[29]

Ministró a los enfermos, los pobres y los encarcelados

Elizabeth Evans (1776-1849) nació en Newbold, Inglaterra. Era hija de Thomas y Mary Tomlinson.

Quedó huérfana antes de cumplir un año. En su lecho de muerte, María la entregó al Señor.

El padre de Evans era miembro de la Sociedad Wesleyana de Griffydam, y desde una edad temprana, Evans fue llevado a la capilla. Comenzó a trabajar a la edad de 14 años, en Derby. Luego se mudó a Nottingham para trabajar como mecánico de encaje, lo que requería una gran destreza.

A la edad de veintidós años, en 1797, fue a una casa de reuniones wesleyana, donde el reverendo George Smith ministraba, y tuvo una profunda experiencia espiritual al comenzar una nueva vida.

Evans comenzó a ministrar a los enfermos, los pobres y los encarcelados. Su misión en South Derbyshire fue rechazada por el ministro local. Pero predicó en todas partes, llevando a muchos al Señor.

Predicando en Ashbourne, el predicador local y líder de clase Samuel Evans la cortejó y se casó con ella en 1804.

Los dos predicaron en varios lugares, incluidos Derby, Royston, Ellastone y Millhouse.

A veces caminaban 15 millas los domingos para predicar. Hugh Bourne, cofundador del Movimiento Metodista Temprano, quedó impresionado al escucharlos predicar en Wooton.

En 1819, Evans y Samuel se establecieron en Wirksworth, donde participaron en un gran avivamiento.

En ese momento, había oposición a la predicación de las mujeres. Esto hizo que dejaran a los "wesleyanos" y se unieran a los "metodistas arminianos". Sin embargo, al final de sus vidas, se reunieron con los "wesleyanos".

Evans se convirtió en uno de los grandes predicadores del siglo XIX y fue inmortalizado en la novela Adam Bede (1859) de Mary Evans, sobrina de Samuel, que escribió bajo el seudónimo de George Eliot.

En su novela, la predicadora Dinah Morris del memorable sermón de Hayslope es Elizabeth Evans. La novela Adam Bede se convirtió en una película muda británica en 1918.

En 1991, se produjo con éxito una nueva película de Adam Bede.[30]

Totalmente dedicado a Dios

Alexander Mather (1733-1800) nació en Brechin, Escocia. Fue educado rigurosa y severamente por su padre, que era anglicano. Esto lo llevó a abandonar su hogar a la edad de 12 años en 1745 para apoyar a los rebeldes contra el rey en la "Revuelta jacobita".

Se salvó de morir en combate, y cuando se salvó de ahogarse, sintió que Dios lo había salvado con un propósito. Los rebeldes fueron perseguidos y su padre no lo aceptó.

Después del perdón de los rebeldes, su padre lo dejó regresar a casa, pero no lo apoyó en la escuela. Mather trabajó con su padre en la panadería. A la edad de 19 años, se fue a Londres, donde se convirtió en panadero y se convirtió por la predicación de Wesley.

Convenció a su jefe y a los otros panaderos londinenses de que se negaran a hornear pan los domingos. Con el tiempo, su jefe se hizo rico. Esto fue visto como para honrar el domingo.

En 1756, cuando se sintió llamado a predicar, Wesley le dijo: "Ser un predicador metodista no es el camino hacia la comodidad, el honor, el placer o la ganancia. Es una vida de trabajo duro y fracaso".

Para decirlo sin rodeos, Wesley dijo que los predicadores a menudo viven con escasez y "son propensos a ser apedreados, golpeados y abusados de varias maneras. Considere esto antes de participar en una forma de vida tan incómoda".

Era un guerrero y aceptó. Mather organizó iglesias y su predicación de la perfección cristiana fue poderosa. Permaneció en la historia metodista.

En 1757, se convirtió en el primer predicador casado en ser aceptado y pasó a predicar en Irlanda.

Ese mismo año, después de su solicitud a Wesley, la Conferencia Metodista de Londres aprobó dinero adicional para la esposa de Alexander Mather, comenzando así la tradición de proveer para la esposa del predicador itinerante.

En 1788, se convirtió en el primer itinerante en ser ordenado para trabajar en Inglaterra.

Mather fue quien invitó a Francis Asbury a ser predicador local. Más tarde, en Estados Unidos, Asbury se convirtió en el primer obispo metodista de América del Norte. Mather era uno de los confidentes más cercanos de Wesley.

Preguntó y Mather dio un relato de su experiencia, que tuvo lugar en 1857, en Rotherham, Inglaterra: "Lo que experimenté en mi propia alma fue una liberación instantánea de todos esos malos temperamentos y afectos que tenía... un completo desapego de toda criatura, con una entera devoción a Dios; y desde ese momento encontré un placer indescriptible en hacer la voluntad de Dios en todas las cosas. También tenía el poder de hacerlo, y la aprobación constante de mi propia conciencia y de Dios.

Tenía sencillez de corazón y una sola mirada a Dios, en todo momento y en todo lugar, con tanto celo por la gloria de Dios y el bien de las almas. Sobre todo, tuve una comunión ininterrumpida con Dios (...)".[31]

Ferviente y celoso

Gideon Ouseley (1762-1839) nació en Dunmore, condado de Galway, Irlanda. Provenía de una familia anglicana irlandesa de gran respetabilidad.

Su padre quería que fuera sacerdote, pero pasó gran parte de su infancia en las cabañas. Siendo el hijo mayor, su padre no lo dirigió a ninguna profesión, sino que fue heredero de la herencia de su padre. Recibió una educación completa. Su hermano menor fue educado para el ejército y se convirtió en general de división, Sir Ralph Ouseley.

Gedeón se casó a la edad de 20 años y tuvo una vida salvaje gastando su fortuna y la de su esposa. Terminó perdiendo un ojo con un disparo en un desastre en la taberna y comenzó a tener una apariencia aterradora.

Más tarde, comenzó a tener profundos sentimientos religiosos, llegando a la convicción de su pecado. A menudo clamaba: "¡Señor, ayúdame! ¿Qué debo hacer? ¿Quién me enseñará? El sacerdote y el ministro no son mejores que yo, tan tonto como soy. ¡Todos somos un montón de tontos juntos!"

Su aldea fue visitada en 1789 por algunos predicadores metodistas, y recibió mucha luz con respecto a las cosas espirituales.

Tuvo visiones del infierno, pero en 1791 se convirtió al metodismo y recibió el perdón y la paz. "Los frutos de la justificación fueron manifestados inmediatamente por él, yendo de casa en casa, y de vecino en prójimo, invitándolos a venir a Cristo".

Predicó en un caballo blanco. Su primer sermón fue predicado en el patio de una iglesia en un funeral.

Predicó en las calles y en el cementerio, en ferias y mercados, dondequiera que pudiera encontrar una congregación reunida, protestante o católica.

En la Conferencia de 1802, fue nombrado para la misión irlandesa. Predicó en las provincias de Leinster, Munster y Ulster. Su palabra fue respondida con poder, y muchos de los rebeldes se convirtieron.

En 1805, fue designado para trabajar con el reverendo Wm. Hamilton. Mientras predicaba un sábado en las calles de Carlos, a cientos de trabajadores rurales que estaban en la ciudad en busca de empleo, con sus garfios o hoces sobre sus hombros, fue apedreado, pero un caballero abrió la puerta y lo arrastró a su casa.

Al visitar la ciudad de Drogheda, donde se reunían muchos mendigos, deseó predicarles y reunió a una gran multitud de mendigos además de cientos de otros reunidos por curiosidad. Predicó sobre la historia del hombre rico y Lázaro. No solo los mendigos lloraban, sino también los curiosos. Siempre tenía un consejo para cada persona.

En la conferencia de 1810, fue reelegido para la misión en Galway y Clare con dos nuevos hombres nombrados como sus asistentes. "Continuó su trabajo infatigable en beneficio de sus humildes y degradados compatriotas, en los distritos más remotos y solitarios del país, a menudo sin comida ni refugio; y exponiéndose al oprobio de los católicos ignorantes y degradados, para poder ganarlos para Cristo, y tal era su fervor y celo, que nunca estaba satisfecho, a menos que durante cada reunión y bajo cada sermón las almas se convirtieran a Dios".

Mientras cabalgaba, leía el Nuevo Testamento griego o un libro en latín, inglés o irlandés. En todas partes tenía palabras de instrucción y consejo para los inconversos. "En una ocasión se detuvo en un arroyo para dar de beber a su caballo, y vio a una doncella parada a la puerta de una casa vecina, se acercó a ella, la tomó de la mano, le habló de su alma y oró para que la bendición de Dios descansara sobre ella. Unos dos años más tarde, al ser invitado a predicar en ese barrio, una joven lo invitó amablemente a ir con él a su casa.

La joven lo recibió de manera afectuosa y le informó que era la misma persona a la que se había dirigido dos años antes. Dijo que las "pocas palabras de consejo e instrucción que se dieron entonces, la llevaron a Cristo; Que ahora estaba casada con el joven que lo había invitado a casa, y que su esposo era un líder de clase".

En 1811 fue nombrado nuevamente para la misión de Galway y Clare y fue grandemente bendecido con la construcción de una serie de capillas. Desde la conferencia de 1813 hasta el final de su vida en 1839, continuó predicando para la salvación de sus compatriotas.

Visitó Irlanda, Inglaterra y Escocia predicando a congregaciones opresivas. Fue uno de los evangelistas irlandeses más conocidos después de la muerte de John Wesley. Predicó tanto en inglés como en su idioma nativo. Era de un pequeño grupo de hombres llamados 'predicadores del Calvario' o 'gorros negros'.[32]

Gran comprensión y profunda piedad

John Nelson (1707-1770) nació en Birstal, Inglaterra. Cuando era niño, escuchaba a su padre leer la Biblia a la familia. Cuando su padre murió, se volvió adicto a casi todo tipo de pecado. Siempre estaba angustiado y decidió mudarse para romper sus hábitos pecaminosos.

En busca de descanso y paz, buscó varias denominaciones en Londres, pero solo encontró la paz después de ser impactado por la predicación de Wesley.

Escuchó predicar a Whitefield, estaba muy feliz, pero aún no estaba seguro de la salvación. Asistió al culto público de casi todas las denominaciones sin ningún resultado para su vida.

Luego oyó a Wesley predicar en Moorfields, y luego informó: "Su semblante me infundió un miedo tan espantoso, antes de oírlo hablar, que hizo que mi corazón oscilara como el péndulo de un reloj; y cuando habló, pensé que todo su discurso estaba dirigido a mí. Cuando terminó, le dije: 'Este hombre puede contar los secretos de mi corazón, ha descrito completamente la enfermedad de mi corazón, pero no me dejó allí, porque mostró la medicina, sí, la sangre de Jesús. Entonces mi alma se llenó de consuelo a través de la esperanza".

Llenos del Espíritu Santo, sus compañeros de cuarto se alarmaron y le ordenaron que saliera de la habitación. Después, sus amigos quisieron llevarlo de vuelta al pecado, pero él se resistió. Los vecinos vinieron en gran número para ver lo que el Señor había hecho en su vida. Iba a trabajar en el comercio durante el día y por la noche predicaba, convirtiendo a varios vecinos.

Una vez estaba predicando en una congregación en Adwalton cuando un policía lo llevó ante los comisionados en Halifax, quienes se negaron a aceptar la fianza o escuchar cualquier cosa que se dijera a su favor. Lo llevaron de Halifax a Bradford y allí lo pusieron en un calabozo sin comida ni bebida. Se hicieron varios llamamientos al capitán para que permitiera un alojamiento más cómodo, lo cual fue inútil.

Fue llevado de Bradford a Leeds, donde cientos se habían reunido para ver al predicador metodista. Nelson relató: "Una mujer alegre y bien vestida se acercó a mí y puso su rostro casi en el mío, y dijo: 'Ahora, Nelson, ¿dónde está tu Dios? Él le respondió que leyera Miqueas 7:8-9. Gracias a la influencia de Wesley, Lady Huntingdon y otros, Nelson fue liberado.

En 1742, Wesley visitó a Nelson, predicó en su vecindario y se quedó en su casa. Fue el pionero metodista en West Yorkshire. Dejó su trabajo y salió a varios lugares a predicar el Evangelio. Wesley lo llamó a Londres para evangelizar. Muchas vidas se convirtieron. Viajaban, predicaban, recogían moras para su comida y dormían en el suelo.

Nelson sufrió una fuerte persecución por parte del clero y personas hostiles. Era de un coraje intrépido. Su vida parecía ser un acto continuo de fe.

Era abnegado y de estricta templanza. Durante dos horas, todos los días hablaba con Dios. Ayunaba una vez a la semana y donaba el valor de los alimentos a los pobres. Durante 33 años viajó como predicador.

Era vivaz, activo y fuerte. Su experiencia fue clara y bíblica. Su vida parecía ser un acto continuo de fe. Era de gran comprensión y profunda piedad, y era muy estimado. Fue llamado el "príncipe de los predicadores metodistas" y "Apóstol del Norte".

Una mujer con un profundo conocimiento del carácter y los propósitos de Dios

Elizabeth Patten Bennis (1725-1802), más conocida como Eliza, nació en Limerick, Irlanda. Era hija de Isaac y Alice Patten, una familia presbiteriana.

A la edad de 18 años perdió a su padre, y dos años más tarde (1745) se casó con su primo Mitchell Bennis (1720-1788), un comerciante de ferretería.

En 1749, el predicador metodista Robert Swindells se dirigía a Waterford y pasó por Limerick, donde predicó en las calles. Eliza "escuchó un alboroto fuera de su ventana: era una multitud de personas que seguían a un predicador metodista que acababa de llegar a la ciudad y estaba predicando al aire libre. Elizabeth decidió ir a escucharlo".

Un mes después, fue la primera en asistir a una clase metodista en Limerick formada por Swindells. El 23 de junio, escribió que "la luz irrumpió en mí en un momento y desterró todos los matices de oscuridad... Ahora podía creer en tener a Cristo como mío y apropiarme de Su misericordia para mi propia alma".

Esta experiencia de conversión formó la base para el resto de su vida. Pronto se convirtió en líder de clase en la reunión de la sociedad metodista en Limerick. Durante cuarenta años fue una de las principales líderes. Era "sincera, enérgica y notablemente enfocada".

Eliza quedó impresionada por la predicación de Thomas Olivers, que formaba parte del circuito de Limerick, a principios de 1757. Sus mensajes sobre la santificación completa fueron muy apreciados por ella. Eliza se volvió útil para el metodismo. Conoció a John Wesley, con quien mantuvo una larga correspondencia (1749-1779).

Entre 1750 y 1760 murieron seis de los hijos de Bennis.

"Eliza fue una de esas mujeres notables que influyeron en el curso de la historia metodista. Participó activamente en el crecimiento y mantenimiento del metodismo en Irlanda y sirvió como asesora espiritual para muchos". Mantuvo informado a Wesley de los acontecimientos irlandeses.

Ayudó con consejos y correspondencia alentando a los predicadores metodistas, entre ellos John Stretton. Fue mentora de predicadores.

El 29 de octubre de 1770, John Stretton escribió a Eliza Bennis. La carta revela cómo pudo animar a nuevos conversos o predicadores:

"Querida señora:

Un GRAN sentimiento de su bondad hacia mí en Waterford, y un recuerdo agradecido de las advertencias cristianas que luego me impuso, confío en que nunca serán erradicados de mi corazón; Animados por ellos (...)".

El 22 de marzo de 1777, Eliza escribió una hermosa carta a Stretton, donde revela su profundo conocimiento del propósito, el trato y el carácter de Dios: "Querido hermano Stretton:

Aquel que te llamó por su gracia a la gran obra en la que estás ocupado todavía te guardará y te hará fiel en tu llamado; Su ineptitud no es una barrera en su camino que pueda enviar al que pasa por Él; Y generalmente elige instrumentos necios y viles, para que su poder y gracia se manifiesten a todos: Bendito sea Dios que te dé a sentir tu pobreza, tienes necesidad de ella, cuántas veces habrías caído por el orgullo de tu propio corazón, si no tuvieras esta visión de ti mismo; ¡Qué gracioso es, entonces, mantenernos a la vista de nosotros mismos, para que podamos estar igualmente equilibrados; Y sintiendo que nuestras necesidades son llevadas a buscar ayuda donde solo se puede encontrar; A partir de nuestra propia experiencia, y la de los demás, podemos ver cualquier bendición que Dios esté dispuesto a otorgar.*.

Eliza escribió sobre el propósito y los caminos amorosos de Dios: "Él trata con ternura; No quebranta nuestros espíritus, descubriendo de inmediato para nosotros todas las imágenes odiosas de nuestro corazón; Pero poco a poco a medida que seamos capaces de soportar, y con este punto de vista para nosotros también, el remedio; Como el descubrimiento de una rica mina, que aunque custodiada con un tesoro inestimable, requiere trabajo para ponernos en posesión de ella, debemos cavar antes de llegar a la perla (...)".

Luego, Eliza dice: "(...) Olvido que estoy escribiendo a un predicador, de quien debería recibir instrucción; La seriedad de mi alma por ti me lleva más allá de mis límites; No daré otra excusa que la de que amé tu alma y me gustaría que fueras tan feliz como Dios pueda hacerla".

El 24 de julio de 1777, Eliza volvió a escribir a Stretton:

"En la sinceridad de mi corazón casi puedo creer por ti; Que el Señor te ayude a creer por ti; Que el Señor os ayude a creer por vosotros mismos; Hasta que lo hagas, nunca podrás ser feliz; pero cuando lo hagas, ten cuidado de no buscar o esperar más en ese estado de lo que Dios ha prometido; Recuerden que no es una liberación de tentaciones, pruebas o enfermedades naturales; sino una liberación del pecado".

Eliza le dice a Stretton que debe tener esto en cuenta. Así Dios "responderá muchas dudas y perplejidades que Satanás pueda arrojar en tu mente, también te ayudará a soportar el oprobio y responderá las preguntas reales o burlonas que se te hagan sobre este estado; Porque una vez que declaras las buenas nuevas de la Santificación, te estableces como una marca para el Alma que busca seguir.

Eliza era una mujer con un profundo conocimiento del carácter y los propósitos de Dios. Su diario (1749-1779), iniciado a la edad de 20 años, relata su progreso espiritual en la Sociedad Metodista.

El negocio de su esposo prosperó y le trajo una gran riqueza. Más tarde falleció y Eliza tuvo problemas financieros. Ella y su familia emigraron a Filadelfia, EE. UU., y murieron en 1802. Su correspondencia fue publicada por su hijo Thomas Bennis en Filadelfia en 1809.

Lo más destacado del talento de Eliza es una colcha que tomó en su viaje desde Irlanda a su nuevo hogar en Estados Unidos en la década de 1780. La tela se llamaba "Voluntarios irlandeses". Esta tela puede haber tenido un significado para Eliza con su esposo y fue fundamental en la formación de un cuerpo de voluntarios irlandeses de Limerick.

La Biblioteca B. L. Fisher del Seminario Teológico de Asbury en los EE. UU. ha adquirido la Colección Bennis, un archivo de las cartas originales de Eliza Bennis a John Wesley. Era corresponsal habitual de Wesley. Eliza es considerada una de las "madres" del metodismo.[33]

[1]HEITZENHATER, Richard P.Wesley y la gente llamada metodista. São Bernardo do Campo-Rio de Janeiro: Editeo-Pastoral Bennett, 1986, p.322.

[2]HEITZENHATER, Richard P., Ibíd., p. 230

[3]Sir Thomas Henry Hall Caine (1853-1931), comúnmente conocido como Hall Caine, fue un escritor británico. Es mejor conocido como novelista y dramaturgo de finales de la era victoriana y las épocas eduardianas. En su época, fue extremadamente popular y, en el apogeo de su éxito, sus novelas superaron a las de sus contemporáneos. Muchas de sus novelas también se convirtieron en películas. Sus novelas eran en su mayoría novelas románticas, que involucraban triángulos amorosos, pero también abordó algunos de los problemas políticos y sociales más serios de la época.

https://en.wikipedia.org/wiki/Hall_Caine.

[4]https://seedbed.com/methodism-as-a-revivalistic-movement/

[5]https://media.sabda.org/alkitab-10/library/collect/wesley_c/wes_ww01.pdf

[6]https://seedbed.com/methodism-as-a-revivalistic-movement/

[7]https://academic.oup.com/book/2735/chapter-abstract/143204893?redirectedFrom=fulltext&login=false

[8]https://www.jstor.org/stable/41179847 · Archivo PDF

[9]HEITZENHATER, Richard P. Wesley y la gente llamada metodista. Editeo-Pastoral Bennett, 1996, p.108.

[10]Ibíd., p.123.

[11]LELIÈVRE, Mateo. John Wesley - Su vida y obra. São Paulo: Editora Vida, 1997, p.366.

[12]LELIÈVRE, Mateo, Ibidem, p.217.

[13]Ibíd., p.216.

[14]Ibíd., p.217.

[15]Ibíd., p.218.

[16]HEITZENHATER, Richard P., Ibíd., p. 277.

[17]Ibíd.

[18]BURTNER, Robert - CHILES, Robert. op. cit. p. 213.

[19]BURTNER, Robert - CHILES, Robert. op. cit. p. 218.

[20]BURTNER, Robert - CHILES, Robert. op. cit. p. 210.

[21]WESLEY, João. Extractos del Diario de Juan Wesley, São Paulo, Methodist Press, 1965, p. 127.

[22]WESLEY, João. Sermones de Wesley, São Paulo, Methodist Press, 1953, Vol. I, p. 270.

[23]WESLEY, John, Sermones de Wesley, op.cit, p. 271

[24]Ídem.

[25] BARBIERI, Sante Uberto. Extraña cepa de Bold. São Paulo: Prensa Metodista, p. 93.

HEITZENHATER, Richard P. Wesley y la gente llamada metodista. São Bernardo do Campo-Río de Janeiro: Editeo-Pastoral Bennett, 1986.

LILIÈVRE, Mateo. João Wesley – Su vida y obra. São Paulo: Editora Vida, 1997,

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https://en.wikipedia.org/wiki/John_William_Fletcher

http://jonatasjoao316.blogspot.com.br/2010/02/john-fletcher-1729-1785-mary-bosanquet.html

[26]BARBIERI, Sante Uberto, Estranha estirpe de audazes. Prensa metodista, SP.

REILY, Duncan Alexander. Metodismo brasileño y wesleyano. São Bernardo do Campo: Imprensa Metodista, 1981 http://www.library.manchester.ac.uk/searchresources/guidetospecialcollections/methodist/using/womeninmethodism/roleofwomen/.

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https://biblicalstudies.org.uk/pdf/whs/55-3.pdf

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http://www.stjohnsallestree.org.uk/meth_hist_part3.htm

[27] https://en.wikipedia.org/wiki/Sarah_Crosby

https://www.umcdiscipleship.org/resources/exploring-stewardship-with-the-saints-sarah-crosby-the-way-of-necessity

http://myemail.constantcontact.com/This-Week-in-the-Season-of-Saints--Dietrich-Bonhoeffer-and-Sarah-Crosby.html?soid=1102418495171&aid=MkQLGqUWSVU

https://18thcenturyculture.wordpress.com/primary-sources/the-armenian-magazine/an-account-of-sarah-crosby/

http://wesley.nnu.edu/john-wesley/john-wesley-the-methodist/chapter-x-lay-helpers/

[28]https://histometodista.wordpress.com/2016/01/29/los-predicadores-laicos-maria-bosanquet-xix/

https://www.findagrave.com/cgi-bin/fg.cgi?page=gr&GRid=88658145

https://www.metodista.br/revistas/revistas-ims/index.php/EL/.../4411

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http://www.academia.edu/11871419/That_Peculiar_Voice_Jane_Eyre_and_Mary_Bosanquet_Fletcher_an_Early_Wesleyan_Preacherhttp://chrisfieldblog.com/2008/09/01/mary-bosanquet-early-methodist-woman-preacher

[29]*La Guerra de los Siete Años fue una serie de conflictos internacionales que tuvieron lugar entre1756 y1763, durante el reinado deLuis XV, entre elFranciaelMonarquía de los Habsburgo y sus aliados Fue el primer conflicto en tener un carácter global, y su resultado a menudo se señala como el punto focal que dio lugar a la inauguración de laEra moderna(https://pt.wikipedia.org/wiki/Guerra_dos_Sete_Anos).

https://en.wikipedia.org/wiki/Thomas_Webb_(Metodista)

http://www.pregacaoexpositiva.com.br/downloads/Estranha_Estirpe_de_Audazes.pdf

https://canadianperspective.wordpress.com/2006/05/22/thomas-webb-the-methodist-captain/

http://media.sabda.org/alkitab-6/wh2-hdm/hdm0211.pdf

http://iglesiapueblonuevo.es/index.php?codigo=bio_webbt

https://en.wikipedia.org/wiki/Thomas_Webb_(metodista)http://www.worldcat.org/title/thomas-webb-a-founder-of-american-methodism-a-tribute-to-a-man-of-courage-and-vision-in-commemoration-of-the-250th-anniversary-of-his-birth-on-may-31-1725/oclc/4224070

http://www.nyhistory.org/exhibit/captain-thomas-webb-1724-1796

http://historicstgeorges.weebly.com/at-the-start.html

[30] http://www.mywesleyanmethodists.org.uk/page/elizabeth_evans?path=0p3p

http://www.myprimitivemethodists.org.uk/page_id__13.aspx

https://en.wikipedia.org/wiki/Dinah_Morris

https://en.wikipedia.org/wiki/Adam_Bede

[31] *Los levantamientos jacobitas, una serie deLevantamientos, rebeliones yBatallas En los reinos deInglaterra,EscociayIrlandaocurrido entre1688y1746. Las insurrecciones tenían el objetivo de reconducirJacobo II de Inglaterra, y más tarde los descendientes de laCasa Stuart, al trono después de ser depuesto por elParlamentoDurante elRevolución gloriosa. El origen del nombre de la serie de conflictos está en Jacobus, la formaLatíndel nombre inglés James. Aunque cada levantamiento jacobita tenía características únicas, formaban parte de una serie más amplia de campañas militares por parte de losJacobitas, la misma llamada aGuerra jacobita, en un intento de devolver a los reyes Estuardo a los tronos de laEscociayInglaterra(https://pt.wikipedia.org/wiki/Levantes_jacobitas).